Terapia para adolescentes
La adolescencia es una de las etapas del ciclo del desarrollo donde una persona experimenta grandes cambios a nivel físico, pero también cognoscitivo y socioemocional. Durante esta etapa, se forja la
personalidad y se desarrolla el razonamiento.
Es una fase clave en el crecimiento de una persona en la que se producen muchos cambios y, en la mayoría de los casos, dudas e incertidumbres. Se genera una “revolución interior” en la que el adolescente puede
sentirse incomprendido dentro del ámbito familiar al percibir que no lo entienden o que no han pasado por la misma experiencia. Asimismo, intentan romper los límites que les establecen sus padres. Sienten que quieren coartar su libertad y necesitan revelarse. En ocasiones también, existe una
excesiva preocupación por el aspecto físico. Les preocupa su apariencia física y la moda.
Durante esta etapa tienen sus primeras experiencias en el amor y el sexo, por lo que se esfuerzan en gustar y gustarse, y la pertenencia a un grupo se hace fundamental en la mayoría de los casos.
Otro aspecto importante para considerar son los cambios en el estado de ánimo. Cambio y descontrol de emociones que produce reacciones desmedidas ante cualquier discusión o problema por pequeño que sea.
La adolescencia es una de las etapas del desarrollo más complicadas y difíciles, tanto para la persona en cuestión como para las familias y los docentes.
De esta manera, durante la terapia psicológica, el adolescente recibe apoyo emocional para que ser capaz de resolver conflictos con otras personas, entender sus propios problemas y emociones, así como generar nuevas respuestas ante sus conflictos internos.
Por un lado, la intervención psicológica puede ser específica —por ejemplo, centrada en cambios en el comportamiento o mejora de las relaciones con los amigos o con la familia— y, por otro, puede
llevarse a cabo desde un abordaje más generalizado. Por ejemplo, para reducir la ansiedad o bien fomentar la autoestima.
Puedo entender lo que te pasa, te puedo ayudar!
Terapia para Adultos:
La psicoterapia individual permite abordar las dificultades de la propia vida o situaciones de malestar derivadas de hechos puntuales como duelos, separaciones, cambios vitales o bruscos o de síntomas específicos como ansiedad, pánico, insomnio, depresión, insatisfacción que hace que no seamos nosotros
mismos, perduran en el tiempo, interfieren en nuestra vida y no somos capaces
de gestionar ese malestar.
Estar triste o con ansiedad en un momento concreto es normal y sano, pero si esta situación se prolonga no se debe normalizar.
La decisión de buscar ayuda y contar con ayuda profesional es dar el primer paso para empezar a cambiar tu situación. Estas siendo consciente de las dificultades que generan tu sufrimiento y te animas
a buscar nuevas formas de acoger y resolver problemas.
Anímate puedo ayudarte!